Las cenizas de Maquiavelo

El antimaquiavelismo de los siglos XVI y XVII ocurre en un momento de fortalecimiento de la ortodoxia católica que inaugura un período de busca y captura, acoso y derribo de la disidencia y la herejía. Sin embargo, la cuestión no es sencilla ni unívoca. El de Maquiavelo es uno de esos rarísimos casos en los que un autor es condenado simultáneamente por los dos bandos en conflicto y se convierte en argumento para sentencias contrarias, pues si para los católicos era el enemigo en casa, -anuncio y aliado del movimiento reformador-, los reformistas lo vieron como un ejemplo de la decadencia católica e inspirador, desde la tumba, de la masacre de la noche de San Bartolomé, nada más y nada menos. Si Maquiavelo tuvo el sentido del humor que el autor de este libro le presupone, en medio del horror, seguramente se habría mordido los dedos aguantándose las carcajadas.